Reencuentro con antiguos alumnos de La Compasión.

Los ex alumnos de la primera promoción de la ESO (1995-1998) del Colegio La Compasión han quedado para encontrarse después de 26 años y han invitado a los profesores que en aquel período les dieron clase. Para todos los que hemos acudido ha sido muy emocionante y gratificante. Nos han trasmitido mucho aprecio y cariño.  

El primer saludo ha sido para situarnos en el “quién es quién” y para refrescar la memoria sobre las asignaturas que dábamos en ese momento. Luego, en seguida, hemos pasado a recordar anécdotas de “aquellos maravillosos años”.

Yo les daba clase de naturales y me hablaban de esta asignatura. Se acordaban mucho de las salidas al Río Arga para ver los pájaros, y de que ellos estrenaron los prismáticos y de la autonomía que sentían saliendo sin profesores para observar las diferentes especies.  Me han dicho que todavía guardaban los trabajos que hacíamos sobre transgénicos, sida, plásticos…También me han regalado los oídos diciéndome que explicaba bien y que tenía mucha paciencia.

Una de las cosas más reconfortantes ha sido saber que habían elegido sus estudios gracias a los profesores del cole. A mis compañeros profesores que daban euskera, o tecnología, lengua o inglés, también les comentaban la gran influencia que habían tenido sus clases sobre ellos.

Ahora, algunos de estos alumnos son profesores, trabajadores sociales, carpinteros, ingenieros, pedagogos, enfermeros, bomberos… Natalia, Iosu, Ator, Teresa, las Patricia, Iñigo, Carolina, los Javier, Mª Carmen, María, Juanjo, Ainara, Rebeca, Roberto, Ruth, Sergio, los David, las Naiara, Eloy, Jonathan, Pablo, Ana, Eduardo, Andrea, Agurtzane, Maite… ¡Ha sido un gusto veros!

Un tema muy importante del que también hemos hablado ha sido del trato que sufrieron por parte de algunos compañeros. Entonces no se hablaba de bullying pero hemos recordado que se daban casos de maltrato o acoso escolar. Tanto alumnos como profesores éramos muy conscientes de aquella dolorosa situación.

Los profes hemos recordado a sus hermanos y a sus padres. Con los padres teníamos una relación muy cercana ya que en aquellos momentos estaban muy implicados en el día a día del colegio. Los antiguos alumnos recordaban nuestros embarazos y a nuestros hijos de pequeños y alguna que otra trastada.

Sus antiguos profes estamos muy agradecidos por esta invitación tan cariñosa. ¡Cuántas emociones! ¡Qué buen rato hemos pasado recordando nuestras vivencias del colegio!